lunes, 24 de noviembre de 2008

Gente NNGG, gente sin complejos

Este fin de semana, las Nuevas Generaciones del PP de Madrid celebraron su XI Congreso en Las Rozas. Su ponencia política llevaba el sugerente título de "Defendiendo nuestras ideas sin complejos", y hay reconocer que, en gran parte, es verdad. Los de NNGG se sueltan la melena en muchos asuntos y se muestran sin máscara, tal como son. Dicen lo que quieren sin anestesias, lo cual es de agradecer para que todos sepamos a qué atenernos.

Y es que en esto del neoliberalismo, los de Espe son ya más aguirristas que el Papa, o más papistas que la Aguirre, o como se diga.

Comienzan afirmando en la introducción que están “convencidos de que la actividad política es una inmejorable forma de transformar la sociedad”, y supongo que será por eso por lo que se pasan el resto del texto repitiendo incesantemente que cuanto menos Estado, cuanta menos política –cuanto menos cambio-, mejor. Dicen defender el “verdadero progreso”; es decir, "el que genera riqueza", sin hacer ningún tipo de alusión, por supuesto, a la forma en que ésta debe repartirse.

No creen en “Papá Estado”, no creen en el “intervencionismo del Gobierno” y afirman que la posible despenalización de la eutanasia o la nueva regulación del aborto son claros ejemplos de intervención gubernamental. Prefieren un Estado pasivo, un Gobierno que observe cómo la sociedad camina “libre”, por sí sola; o lo que muchos llamaríamos más bien un Gobierno ajeno a los problemas de los ciudadanos, un gobierno al que no interesa regular determinadas situaciones problemáticas o ampliar derechos. No es de extrañar esto, hace unos días vi cómo Pablo Casado, su recién reelegido Presidente, declaraba en una entrevista que “un gobierno no puede ampliar derechos a sus ciudadanos porque la gente posee unos determinados derechos por el simple hecho de nacer, -decía- y todo lo demás es intervencionismo estatal”. Así que eso: en España, a diferencia de otros países como Holanda, hemos nacido con la mala suerte de no tener derecho a una muerte digna, y eso no hay Dios –ni parlamento- que lo cambie.

También apuestan (y cito literalmente) por la “conciliación de la vida familiar y laboral, con medidas como la liberalización de horarios comerciales”. Es decir, el hecho de que una mujer madre de tres hijos que trabaja de lunes a sábado en la frutería del Hipercor de Xanadú, tenga que trabajar también los domingos, es para NNGG una inmejorable forma de conciliar vida familiar y vida laboral.

Hablan de la necesidad de crear empleo a través de la fexibilización del mercado laboral: hablando en plata, la supresión del salario mínimo interprofesional, que claro, como ellos mismos dicen, no genera empleo…Y no les falta razón, seguro que si las empresas pudieran contratar a tres trabajadores por el precio de uno la tasa de paro disminuiría en España. No me gusta caer en tópicos pero es que hay quien se empeña en demostrar su validez cada vez que abre la boca, y claro, ante tanta sinceridad… No se cortan un pelo en decir que no les importa lo más mínimo en qué condiciones se contraten trabajadores, no importan las pequeñas carteras, sólo maquillar macrocifras y generar riqueza en unos pocos a cambio del trabajo de otros muchos.
Si esto no viniera además de un grupo de 2.500 personas menores de 30 años, que dicen representar a la juventud madrileña y que se presumen herederos de un partido como el PP, quizás no me preocuparía tanto.

También rechazan el relativismo moral heredado de Mayo del 68, pues “no es cierto que no exista una verdad”, existe, y ellos son los encargados de defenderla. Ya se sabe que moral no hay más que una, y a ti te encontré en la calle. Y nosotros mientras, aquí, defendiendo lo que no era…¡ains! Qué fallo más tonto. Mil disculpas, enserio. Perdón…de verdad.

Además, la velada estuvo amenizada por el ex-presidente del gobierno reciclado en showman televisivo José María Aznar, que cargó contra el “gobierno de progres de pacotilla” para delirio del público asistente. ¡Claro que sí!, esto es lo que necesita España ¡coño!, gente rebelde, gente sin pelos en la lengua, Aznares, Aguirres, gente NNGG, gente sin complejos.

Como dice Almudena Grandes en El País de hoy... "Ríanse. Porque más allá de la risa se extiende el llanto y la úlcera de estómago."

2 comentarios:

Rodrigo Parra Fernández dijo...

me too, tampoco conocia este espacio que ahora seguiré un abrazo enorme y gracias por venir el otro día hasta rivas

Noelia Seibane dijo...

Hola compañero!! Muy buen blog! Gracias por leerme a mi también.
Besos!!